- Soy nutricionista, graduada en la Universitat de Barcelona (UB), y al finalizar obtuve el máster en Antropología Médica y Salud Global por la Universitat Rovira i Virgili (URV). Posteriormente, me especialicé en Trastornos de la Conducta Alimentaria.
- Durante mis años académicos, siempre me he centrado en comprender los determinantes sociales de la salud y en ser consciente de todo lo que la rodea. Durante el máster, tuve la oportunidad de realizar una estancia académica en la Vrije Universiteit Amsterdam, donde pude profundizar en una mirada más amplia de la salud: una en la que los factores sociales, culturales y emocionales que atraviesan la salud se tienen en cuenta.
- Por eso, como nutricionista, ofrezco un enfoque basado en la salud en todas las tallas (HAES), la alimentación intuitiva y la anticultura de dieta, lo cual considero fundamental a la hora de abordar la relación con la comida y el cuerpo.
- Mi experiencia se basa, sobre todo, en la nutrición comunitaria, desarrollando sesiones grupales con población infantojuvenil sobre alimentación consciente y salud integral, así como con personas en situación de vulnerabilidad económica. También he trabajado en el ámbito clínico, atendiendo a pacientes con diversas sintomatologías, así como a quienes desean mejorar su relación con la alimentación.
- Estoy colegiada en el Colegio Oficial de Dietistas-Nutricionistas de Cataluña (CAT002772).
- Atiendo en castellano, catalán e inglés.
Información irrelevante y sobre mi vida personal
- Nací en Mallorca, pero fue durante mis años de universidad en Barcelona cuando descubrí que esta ciudad tenía algo especial para mí. Después de cinco años fuera, he vuelto con muchas ganas de quedarme.
- He vivido en un pequeño pueblo de Polonia y en Ámsterdam, experiencias que me aportaron muchísimo tanto a nivel personal como profesional. Pero también me hicieron darme cuenta de algo importante: necesito vivir en un lugar donde el sol salga la mayoría de los días.
- Durante mi infancia y parte de la adolescencia jugué al ajedrez, llegando a competir a nivel nacional.
- Uno de mis mayores placeres es pasear y hacer excursiones con mi perra.
- Hace unos años descubrí la escalada en rocódromo y se ha convertido en uno de los deportes más desafiantes y gratificantes que he practicado. Lo que más me fascina es que, para mí, no se trata solo de fuerza o técnica, sino, sobre todo, de la parte mental. Escalar implica enfrentarte muchas veces al miedo a caer, y ahí es donde entra lo más importante: confiar en ti misma y en que puedes hacerlo.